BETTER DAYS

 

“Crecer es como bucear. No pienses, sólo cierra los ojos y zambúllete”.

Esa es una de las frases de la película que mejor la definen ya que ésta gira en torno al desarrollo interior por el que todos pasamos en una etapa tan importante como lo es la adolescencia.


Pero, ¿cuál es su argumento?
Nian es una estudiante que se prepara para entrar en la universidad, hasta que una compañera de clase se suicida y se convierte en el objetivo de un continuo bullying. El destino o, como prefiero llamarlo en este caso, su bondad, hace que un chico llamado Bei entre en su vida y ésta cambie totalmente.
Es entonces cuando él decide seguir sus pasos de cerca y ser sus ojos y sus manos, forjando así una relación tan estrecha capaz de romper cualquier barrera. Y hasta aquí voy a contar.

Better days (Derek Tsang, 2019) es una gran joya hecha para educar en valores y concienciar a la gente que no deja indiferente y te invita a reflexionar y a querer mejorar el mundo, ya que nos
enseña la importancia de una educación sin odio y las consecuencias causadas por éste.
De hecho, tanto es así, que en China, país en el que está producida, causó tanta impresión en la sociedad que se crearon no solamente proyectos anti-bullying, sino también leyes que endurecieron las penas.
Personalmente, lo que más me ha llegado de esta maravilla, ha sido la forma en la que se ha narrado la historia a través de la mirada de Jackson y Zhou y cómo los personajes de ambos continuaron su camino a pesar de haberse encontrado con tantos obstáculos, demostrándonos que podemos con todo si nos esforzamos lo suficiente y que, a pesar de que nuestro recorrido pueda parecer oscuro, siempre va a llegar la luz.